¿Te encanta prepararte bebidas? ¿Y si pudieras hacer algo mucho más dulce y saludable?! ¡Entra en escena: el jarabe de fruta! Los deliciosos jarabes de frutas vienen en sabores como fresas, arándanos y melocotones. ¡No hay nada que objetar! — el endulzante hace que tu bebida sea irresistiblemente más adictiva, y además tiene un sabor a fruta.
¡Así es como puedes preparar fácilmente tu propio sirope de frutas en el futuro! Elige cualquier fruta que te guste del mercado o, quizás, cultívalas si tienes un árbol propio. Asegúrate de lavarlas y limpiarlas adecuadamente para quitar toda la suciedad que puedan tener. Luego, corta las frutas en pequeños cubos. Después, pon las frutas picadas en agua en otra cacerola con azúcar y llévalo a ebullición. Luego colócalo en la estufa a fuego bajo hasta que las frutas se conviertan en un sirope. Este paso ayuda a mezclar y combinar todos esos hermosos sabores. Finalmente, cuela la mezcla a través de un colador metálico para eliminar cualquier trozo de fruta. Espera un rato y tendrás un dulce y delicioso sirope en tus manos... ¡con tantas posibilidades!
Los jarabes de frutas se leen WAY mejor que el azúcar. Dado que todos estos ingredientes básicos son naturales, esta sería una opción mucho más saludable para ti. Y no debemos olvidar que hace que tus bebidas sean aún más disfrutables y emocionantes. ¡Al igual que agregar un poco de jarabe de frutas a tus recetas favoritas para hornear o cocinar con un sabor frutal en cada bocado! Jarabe de Frutas: Un endulzante similar a la sacarosa pero ligeramente menos potente que te dará unas pocas calorías menos cuando intentas perder peso. ¡Aún puedes disfrutarlos con mucha menos culpa!
Jarabes de Frutas No hay mucho que no puedas hacer con un jarabe de frutas. O si lo haces, mezcla algunas otras frutas para probar sus sabores también. ¡Entonces lo disfrutarás más, cuanto más tiempo pase, mejor!
Sabor: Las frutas tienen un sabor diferente, así que debes elegir una según tu receta. El jarabe de arándanos podría dividirse en porciones individuales para incluir en magdalenas, mientras que el de melocotón se convertiría en una salsa o vinagreta para pollo a la parrilla.
Dulzura: Dado el contenido de azúcar que tiene el jarabe de fruta, es posible que necesites menos del que indique la receta, así que ádaptalo a tu nivel de dulzura. Ten cuidado al convertir uno por el otro ya que los jarabes son más dulces que el azúcar. Esto significa que puedes ajustar ese sabor perfectamente.
Espesor de viscosidad: No todos los jarabes de frutas tienen la misma viscosidad (espesor), así que encuentra uno que te funcione para tu aplicación. Considera cómo planeas usar el jarabe: usa una versión más líquida para mezclar en bebidas o opta por uno más espeso si vas a hornear con él (como ocurre también en esta receta de avena horneada con pastel de zanahoria).